El ‘golpe’ de la pandemia también fue terrible para el turismo. Por lo que tras la época más debe aprovechar este período para reinventarse mejor. Los expertos hablan de grandes retos de cara al 2030 y dan algunas ideas de cómo adaptarse a estos nuevos tiempos.
Diferentes tipos de turismo
¿Cómo es el turismo después de la pandemia? Hasta que llegó la COVID19 y paró el mundo había cuatro grandes tendencias a nivel turístico. Estas eran las que predominaban y pugnaban por buscarse su propio espacio entre las demás. Las tres primeras estaban consideradas ‘poco sostenibles’. Pero la cuarta, ya tendía a la búsqueda del equilibrio.
Turismo de ‘masas’: viajes a sitios emblemáticos. Dentro o fuera de grupos. Con itinerarios justos y poco tiempo para todo.
Hiperturismo:es la forma menos sostenible de viajar. Muchos vuelos y estadías mínimas en cada lugar. Es el turismo de ‘me echo la foto y me voy’. No aporta prácticamente nada ni al sitio visitado ni al visitante.
Turismo ‘de ocasión’: el que no se planifica mucho y generalmente depende de ofertas puntuales. También incluye escapadas de fin de semana o viajes románticos.
Turismo verde: desde el ecoturismo hasta el turismo resiliente o el cultural. Son las últimas tendencias, que hacen hincapié en la calidad del viaje. Y no en la cantidad de fotos que se pueden sacar, delante de monumentos o sky lines famosas.
Nuevas formas de viajar
¿Cómo es el turismo después de la pandemia? Tras la pandemia han surgido cuatro nuevas tendencias. Que aparentemente han llegado para quedarse. Y algunas son una muy buena noticia para el medio ambiente y los sitios turísticos. Y son las siguientes:
Microturismo
Enfrentarse a una pandemia hizo tomar conciencia a mucha gente del consumo excesivo en el que está inmerso el mundo. Esto dio paso a experiencias ‘casi’ minimalistas. Lo pequeño, corto, raro, único y original se puso de moda. Y así surgieron microaventuras, microvacaciones, microfestivales, micromuseos, etc. Y todsas ellas rodeadas de estrictas medidas sanitarias.
Turismo de última oportunidad
Este es el que implica viajes a sitios que pueden desaparecer o ser modificados drásticamente por el cambio climático. Entre ellos destaca el Top Ten de las islas que pueden desaparecer debido al cambio climático. Pero también monumentos naturales o artificiales erosionados, glaciares y mucho más.
Turismo regenerativo
Esta tendencia se refiere a que los turistas deben, al partir, dejar el destino que visitaron en mejores condiciones que cuando llegaron. La idea central es viajar, pero beneficiando y mejorando el sitio visitado. Y que el turista se convierte en un verdadero ‘hacedor’ durante sus vacaciones.
Turismo de emergencia
También denominado ‘turismo de venganza’, es el que ha surgido a partir de la crisis sanitaria mundial. Es una especie de escapismo. Ir a donde sea y como sea, con tal de viajar. Y ya no importan ni los medios, ni la huella de carbono. A veces tampoco interesa ni el destino. Se viaja por qué se puede. Y porque tras las restricciones hay gente que tiene la necesidad imperiosa de hacerlo.
Para pensar
Por suerte el ecoturismo sigue afianzándose como opción verde y segura. Pero no hay ninguna duda de que las opciones de turismo responsable son las que necesitan más adeptos y mayor apoyo. Si vas a viajar estas vacaciones, piensa qué tipo de huella vas a dejar cuando te vayas. Y qué te llevarás además de fotos y un buen color de la piel. ¿Cómo es el turismo después de la pandemia?
Descontrol en Serbia: humo y bengalas en pleno Parlamento
Un enfrentamiento entre diputados del partido gobernante SNS y miembros de la oposición terminó con el lanzamiento de bombas de humo y bengalas en plena sesión del Parlamento de Serbia. La presidenta del Parlamento, Ana Brnabic, acusó de lo sucedido a la oposición, a la que calificó de «banda terrorista» y afirmó que tres diputadas del SNS resultaron heridas de gravedad. «La vida de la diputada Jasmina Obradovic está en peligro al sufrir un derrame cerebral cuando una granada aturdidora le golpeó la cabeza», dijo la presidenta de la Cámara, un estrecha aliada del presidente populista nacionalista Aleksandar Vucic.
Brnabic, una antigua primera ministra, agregó que pese al caos vivido en la Cámara no piensa interrumpir la sesión de este martes. Al comienzo de la sesión parlamentaria se produjo un altercado entre varios diputados, que fueron separados por los agentes de seguridad, mientras que se lanzaron bombas de humo de color rojo, blanco y negro, además de cohetes. El Parlamento de Serbia se reunió este martes para confirmar, entre otros asuntos, la dimisión del actual gobierno, liderado en funciones por el primer ministro y jefe del SNS, Milos Vucevic, que había anunciado su dimisión a finales de enero.
Mientras que en el interior del Parlamento se produjeron los altercados, cientos de manifestantes se congregaron fuera de la Cámara y lanzaron huevos y otros objetos contra el edificio. La oposición serbia exige que se forme un gobierno de transición, que debería preparar nuevas elecciones «justas y democráticas», tras las repetidas acusaciones de fraude electoral contra el SNS de Vucic en los últimos años. Vucevic dimitió tras meses de protestas por parte de decenas de miles de personas, lideradas por estudiantes, que exigen un Estado de derecho en condiciones en Serbia.
Las protestas fueron desencadenadas por el colapso del techo en la estación de trenes de Novi Sad, al norte de Belgrado, el pasado 1 de noviembre cuando murieron 15 personas. La oposición y los manifestantes aseguran que el accidente mortal fue producto de la endémica corrupción en el país balcánico. Vucic ha anunciado que nombrará un nuevo gobierno en un plazo de 30 días después de que el Parlamento confirme la dimisión de Vucevic, un hombre considerado por la oposición un títere del presidente.