El Ministerio de Salud confirmó este miércoles la detección en Argentina de los primeros dos casos de Candida auris, una especie de hongo que crece como la levadura, provenientes de muestras de pacientes tratados en una clínica de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó días atrás una lista con los 19 hongos infecciosos más peligrosos para la salud pública, en la que incluye a este patógeno.
Según el Boletín Epidemiológico Nacional (BEN), el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas INEI-ANLIS Dr. Carlos G. Malbrán informó a la Dirección de Epidemiología de la cartera sanitaria sobre los dos aislamientos. Además se informó a la Gerencia Operativa de Epidemiología del Ministerio de Salud de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y se realizó una reunión conjunta entre las autoridades y personal de la clínica, equipos técnicos porteños y del Ministerio de Salud. Al momento se encuentran en procesos técnicas moleculares para caracterizar el patógeno y pruebas de sensibilidad in vitro con el método de referencia.
Una de las muestras aisladas proviene de un paciente internado desde el 2 de octubre en la unidad de cuidados intensivos de una clínica de CABA, quien fue derivado de una clínica del exterior del país, trasladado en un vuelo sanitario y, actualmente, permanece internado. El 18 de octubre se le realizó un urocultivo con aislamiento de Candida sp, que diez días después fue identificado como Candida auris en un laboratorio privado.
La otra persona aislada presenta una fístula de drenaje posquirúrgico y es tratada de forma ambulatoria en la misma clínica. Ambos pacientes no compartieron el mismo ámbito en el mismo momento durante su estadía en la clínica y la investigación epidemiológica continúa en proceso. El infectólogo Ricardo Teijeiro explicó que este hongo mayormente se encuentra en hospitales y geriátricos, pudiendo contaminar a los pacientes y residentes aun cuando no tengan ningún tipo de patología.
La infección puede ser riesgosa para aquellos pacientes con problema de inmunosupresión u oncológicos, cuyos perjuicios pueden provocar la muerte. También subrayó que el hongo tiene bastante resistencia debido a que no evoluciona bien con antimicóticos comunes y no es fácil tratarlo como a otros hongos que afectan a las personas. La mayoría de las infecciones se observan en pacientes crónicamente enfermos con estadías prolongadas y alto requerimiento de los servicios de salud.
Fuente: La Voz del Interior