Finalmente, las petroleras, en acuerdo con el gobierno nacional, aumentarán los precios de la nafta y el gasoil entre un 4,5% y un 5,5% esta medianoche, en una suba que se encuentra por encima del 4% que se venía ejecutando mensualmente desde diciembre de 2022. Según informaron fuentes oficiales, a partir de las 00 los surtidores tendrán un aumento de $13 en todos los tipos y categorías de combustible, por lo que el promedio de la suba será diferente según el combustible en cuestión.
Si bien la secretaría de Comercio y las petroleras habían acordado a mediados de diciembre último un sendero de aumentos alrededor del 4% mensual, la aceleración inflacionaria, que no estaba prevista a fines del año pasado, obligó a elevar la pauta de aumento para junio. Para ese objetivo presionaron, además, los estacioneros, quienes sostienen que mientras la inflación llegó al 42,3% en los primeros cinco meses del año, los precios de los combustibles subieron un 23% en el mismo periodo, casi 20 puntos porcentuales por debajo.
Una de las primeras petroleras en confirmar la actualización del precio de los combustibles fue YPF. A través de un breve comunicado, también compartido en redes sociales, la compañía estatal precisó que el aumento será de 11 pesos por litro promedio, lo que en términos porcentuales, significa un 4,5% promedio en todo el país. Entre los motivos del incremento, la petrolera mencionó «la variación del tipo de cambio oficial, las diferencias en los costos logísticos y de operación, el achicamiento de la brecha entre grados de combustible y el aumento de precios de bio combustibles».
Junio tiene una particularidad que podría meter aún mayor presión sobre ese -polémico- 4% oficializado por el Gobierno, y es que, a finales de mayo, fuentes oficiales dejaron trascender que se restringiría el acceso a dólares a las refinadoras para la importación de combustibles, principalmente gasoil. Esto implica que las empresas deberían financiar las compras a través de entidades bancarias internacionales o locales, y también desde sus casas centrales.
El objetivo de Nación sería proteger las reservas de Banco Central y, a cambio, le otorgarían a las empresas un bono dólar linked, para que no cerrar en rojo ya que, el endeudamiento que realizarán sería en dólares, mientras que las ventas son en pesos y con precios pisados. Por su parte, las empresas pidieron que el aumento del 4% promedio a nivel nacional de junio sea más alto. El objetivo de las refinadoras mantener el atraso vigente de precios que escalaría por encima del 11%.
Fuente: Diario Río Negro